1.- Lo clásico vuelve “fuerte”

Las antiguas recetas serán todo un hallazgo para los recién llegados al mundo del cocktail, un mundo que cuenta cada vez con más adeptos, debido en gran parte a la popular fiebre del Gin & Tonic.

Situados en el mediodía, abriendo paso hacia un almuerzo tardío, no habrá quién se resista a disfrutar durante el aperitivo de los ya clásicos Dry Martini, Negroni, Manhattan o Americano, sin olvidarnos del tradicional vermouth.

Sin embargo, los más curiosos optarán por combinaciones más atrevidas con las que alargar la sobremesa, como un Pisco Sour, Tom Collins, White Russian, Old Fashioned o un simple y efectivo whisky solo.

Recetas semi-olvidadas acompañadas del arte del oficio, servidas por el barman o la barmaid responsable de defender lo mejor de cada barra, ataviados de forma elegantemente inconfundible.

2.- No olvidamos el otro extremo: los cocktails de bajo contenido alcohólico.

Así es el ser humano, lleno de contrastes y, casi siempre, extremos. La nueva cultura del mocktail abanderará la tendencia más healthy, reivindicando el derecho a disfrutar de un gran cocktail sin tener que sufrir las consecuencias del alcohol.

Nuevos ingredientes y armonías, combinaciones conocidas – y, otras, por inventar – alcanzarán logros entre un público empeñado en cuidarse sin prescindir de la experiencia cocktail.

Cocktails como nuestra colección de Fresh Fruits Martinis,  los Mocktails de Walnuts Collection y los que están por llegar, harán las delicias de los paladares más exquisitos.

3.- Maridajes o, mejor dicho, “Pairings”. 

Se vislumbraban acercándose desde lejos, pero el 2016 consolida esa tendencia. Maridar delicias gourmet con un cocktail, será la evolución compleja y creativa de lo que antes conocíamos como patatas bravas y cerveza.

Ostras o carpaccio con Martinis, un Brûlée de Maracuyá con cochinillo ibérico, unos Frappes con atún en tempura, tartar de carne o foie gras fresco y un largo y creativo etcétera.

4.- El regreso de los «punch«.

Una nueva tendencia, simple y amigable: compartir delicias cocteleras servidas en una misma ponchera. ¿Nuevo? No, seguramente fue una de las primeras formas básicas que adoptó el cocktail.

Ahí encaja la menospreciada, muchas veces, sangría o cocktails con frutas de temporada y mezclas novedosas.

5.- La presentación será ecléctica y hasta inverosímil.

En 2016 será el año en que el cocktail empiece a tomarse por la vista. No habrá bar que se precie sin recipientes exóticos o sacados totalmente de contexto y, unos combinados con decoraciones recargadas. El eclecticismo será la corriente que dominará nuestras barras.

También llegarán a la mixología la aplicación y adaptación de técnicas innovadoras en cocina, nuevas maquinarias, como por ejemplo el rotaval, vacío roner, etc. Prepárense porque este 2016 viene cargado de aromas, texturas y sabores muy eclécticos.